martes, 21 de octubre de 2014

Luces


  • Contraluz:  es una vista o aspecto de las cosas cuando se miran desde el lado opuesto por el que están iluminadas “cuando una persona se coloca a contraluz solo deja ver su silueta”. Esto es, cuando tomamos una fotografía teniendo la luz detrás del sujeto y  de frente a la cámara.
    • Contraluz en su totalidad. Es justo en la que el sujeto principal de la fotografía se transforma en una silueta con un fondo iluminado, dándole dramatismo a la escena. Para realizar esta fotografía es importante primero exponer correctamente el fondo para después encuadrar al sujeto.

    • Contraluz con varios destellos. Muy parecida al contraluz total pero en este caso el fotógrafo decide iluminar al sujeto principal de manera que éste no queda como una silueta negra. Esta técnica es muy utilizada en el retrato Es importante situar al sol detrás del sujeto para remarcar la silueta y utilizar un reflector o flash para iluminar al sujeto de frente.

    • Contraluz con luz de realce. Consiste en aprovechar la luz del fondo y, además, iluminar el sujeto por delante para realzar el detalle que de otra manera solo obtendríamos sombras. Teniendo al sol detrás del sujeto, se puede iluminar con un flash o una lámpara de frente al sujeto, para lograr una iluminación más uniforme.

  • Luz de fondo: es aquella que está colocada de modo tal que ilumina solamente el fondo, sin tocar al personaje u objeto principal. Si apagamos todas las luces y dejamos solamente la luz de fondo, nuestro motivo principal se visualizará como una silueta negra.

  • Luz frontal: En este tipo de iluminación la fuente de luz se coloca detrás, y sobre el fotógrafo, y enfocada directamente al objeto/sujeto. Debido a la cercanía entre la fuente de luz y el objeto, obtenemos fotografías planas con poca textura, escasas zonas sombreadas y sectores demasiado iluminados. Aunque conseguimos aumentar la cantidad de detalles que podemos observar del objeto. Es recomendable rebotar la luz principal contra el techo para atenuar el efecto de luz plana, y evitar fondos muy reflectantes, ya que éstos producirían reflejos indeseados.

miércoles, 1 de octubre de 2014

Efectos de luz

Frontal: en esta el objeto se encuentra frente al motivo a fotografiar y a espaldas del fotógrafo. Las imágenes que se obtienen son planas, con escasa textura y con pocos espacios sombreados. Esto se debe a la cercanía que existe entre la toma de imágenes y la dirección en que incide la luz.

Lateral: en la iluminación lateral la fuente de luz se ubica al costado del objeto a fotografiar, a 90º de la línea imaginaria que se crea entre la cámara y dicho objeto. Con esta iluminación se obtienen imágenes con un costado altamente iluminado y el otro con una marcada sombra.

Semi-lateral: en este caso, el objeto a fotografiar es iluminado en forma diagonal, es una iluminación intermedia entre la frontal y la lateral, formando un ángulo de 45º en relación a la línea que se produce entre el objeto y la cámara. Éste suele ser el más utilizado porque produce imágenes cuya textura y perspectiva quedan bien marcadas gracias a la sombra oblicua.
iluminación semi lateral
Contraluz: en este caso, la fuente de luz se ubica frente al fotógrafo y detrás del objeto a fotografiar, causando un efecto contrario al de la iluminación frontal. Por medio de esta iluminación se logran imágenes con elevado contraste y poco convencionales.

Semi-contraluz: con esta iluminación la luz recae sobre el objeto de manera intermedia a la lateral y el contraluz, conformando un ángulo de 135º. Esta iluminación también logra resaltar la perspectiva y textura, como en el caso de la semi-lateral. Su diferencia radica en que las sombras quedan proyectadas en los primeros planos y los cielos tienden a reproducirse blancos.

Cenital: en esta iluminación la fuente de luz se ubica arriba del objeto a fotografiar. Generalmente no se realiza de manera artificial en estudios, sino para exteriores, utilizando luz natural del mediodía. La imagen que produce presenta zonas con iluminación sumamente clara y sombras verticales muy marcadas.

De contrapicado: en este caso la luz va de abajo hacia arriba y su posición es prácticamente contraria a la cenital. Por medio de la iluminación de contrapicado se invierten las sombras del rostro, por ejemplo, por lo que se generan imágenes muy particulares, ideales para escenas de misterio o terror.